ARLINGTON, VA – La Federación Nacional de Productores de Leche (NMPF), el Consejo de Exportación de Productos Lácteos de los Estados Unidos (USDEC), el Consorcio de Nombres Comunes de Alimentos (CCFN) y organizaciones aliadas elogian la introducción hoy de la Ley de Protección de las Exportaciones de Valor Agregado Estadounidense (SAVE) para promover la protección de los nombres comunes en la Ley Agrícola 2023. Dirigido en el Senado por el senador John Thune (R-SD), Tammy Baldwin (D-WI), Roger Marshall (R-KS) y Tina Smith (D-MN) y liderado en la Cámara por los representantes Dusty Johnson (R-SD), Jim Costa (D-CA), Michelle Fischbach (R-MN) y Jimmy Panetta (D-CA), el lenguaje ordenaría explícitamente a los Servicios Agrícolas Extranjeros (FAS) del USDA que trabajen con el Representante de Comercio de los Estados Unidos para incluir la protección de términos de uso común como «parmesano», «Chateau» y «Bolonia» como prioridad en las negociaciones internacionales. Este es el primer esfuerzo de proyecto de ley agrícola sobre nombres comunes.
«La falta de una acción firme por parte de las administraciones anteriores ha permitido a la Unión Europea hacer un mal uso y abusar de sus indicaciones geográficas, perjudicando a los exportadores estadounidenses en varios mercados», dijo Jaime Castaneda, Director Ejecutivo de CCFN. «Este nuevo énfasis en la protección de nombres comunes es un paso muy necesario en la dirección correcta para garantizar que nuestros productores puedan vender sus productos en los mercados de todo el mundo».
El lenguaje propuesto enmendaría la Ley de Comercio Agrícola de 1978 para definir «nombres comunes» y ordenaría al Secretario de Agricultura que coordine con el Representante de Comercio de los Estados Unidos para defender proactivamente el derecho a usar nombres comunes para productos agrícolas o productos alimenticios en los mercados internacionales.
«Durante años, la Unión Europea ha estado utilizando indicaciones geográficas ilegítimas para impulsar a sus propios productores a expensas de otros, dando una tremenda prioridad política a dar a las empresas europeas una ventaja sobre los productores en los Estados Unidos y otros países», señaló Castaneda. «Es hora de que nuestro gobierno adopte un enfoque más proactivo para abordar este desafío para que podamos cambiar el rumbo de los productores de alimentos y bebidas que dependen de nombres comunes».